Con la edad y la exposición a las radiaciones ultravioletas, la piel sufre cambios morfológicos y mecánicos que se manifiestan como líneas de expresión, arrugas, flacidez, pérdida de elasticidad y sequedad en la superficie.
En los últimos años se ha estudiado la relación existente entre el rejuvenecimiento y la aplicación de ácido hialurónico (tanto de forma oral como tópica). Numerosos investigadores han demostrado que su aplicación mejora significativamente el volumen y la expresión facial.
El departamento técnico de FarmaQuímica Sur ha preparado una completa monografía sobre los beneficios del ácido hialurónico.